Comunicado Nº 36: Gracias y hasta siempre, Carlo

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A Carlo Ancelotti, el entrenador que en su primera temporada al frente del equipo nos llevó a la conquista de la Copa de Europa, de la Décima, los madridistas le deberemos siempre el máximo reconocimiento, como uno de los grandes entrenadores de la historia del Madrid.

 

Al margen de la discrepante opinión de cada uno de nosotros sobre los aciertos y errores que jalonan su labor, que no es materia que afecte a los fines de la Asociación, la Junta Directiva de Primavera Blanca expresa colectivamente su opinión unánime sobre la importancia de la estabilidad en la dirección de los proyectos deportivos para el éxito a largo plazo.

 

Para el Madrid, sólo para el Madrid, esta temporada es un fracaso. Comenzó con la victoria en los torneos a que da acceso exclusivamente la condición de Campeón de Europa conquistada la temporada anterior, pero se ha saldado con derrotas en las tres competiciones.

 

Aún así, sin perjuicio de la patente necesidad de solucionar aspectos que podrían afectar incluso al reemplazo de parcelas enteras de la dirección técnica, evaluado el desempeño del equipo y el potencial ganado por jugadores importantes de la plantilla gracias a la labor del entrenador, no encontrábamos ventajas suficientes en el relevo de la dirección técnica del proyecto en curso que neutralizaran los inconvenientes que se derivan de la propia naturaleza de un relevo. Tenemos que lamentar que, en su comparecencia ante los medios de comunicación, el Presidente del Real Madrid no nos las haya ofrecido, aunque no dudamos de que a nivel interno se habrán valorado.

 

No por esa opinión pretendemos ignorar las competencias del Presidente y la Junta Directiva para contratar al entrenador que consideren más adecuado en cada momento para la dirección de un proyecto deportivo, que es del Club y no del entrenador, ni nos vamos a rasgar las vestiduras por una decisión que se inscribe en la tradición de un club cuya historia nos enseña que en su quinquenio prodigioso, el que va de 1955 a 1960, tuvo cuatro entrenadores. Pero nos preocupa seriamente la exposición al rendimiento del equipo en que queda la Junta Directiva a consecuencia de la decisión tomada.

 

El Madrid afronta la temporada próxima con un problema de estado sin resolver. Un problema creado por la gestión de los contratos de los jugadores, irresponsable, demagógica, populista y contraria al interés general del Real Madrid, que llevó a cabo Ramón Calderón. Un problema que afecta, por mucho que se quiera negar prácticamente a coro por el periodismo deportivo, al rendimiento del equipo y al ejercicio de las competencias del entrenador para hacer la alineación. Confiamos en que la incorporación de un nuevo entrenador será el instrumento adecuado para resolverlo definitivamente, pero, por la razón antes expuesta, nos alarma que no se le dé una solución concluyente antes del inicio de la temporada. A ello se debe aplicar con la máxima decisión la Junta Directiva, pues esa incorporación no será más que una ventana de oportunidad, y cuando dos veces se ha demostrado que su solución excede las posibilidades de los entrenadores, el respaldo decidido y sin ambages de la Junta es imprescindible.

 

Los madridistas, como hemos dicho al inicio, debemos a Carlo Ancelotti el máximo reconocimiento. De Primavera Blanca tiene además el afecto que se ha ganado.

 

La Junta Directiva de Primavera Blanca se suma hoy a la expresión de ese afecto que, en la situación de cesado, desvelada por las lamentables filtraciones a los medios de comunicación de la gestión interna del club, le expresaron en el Estadio Santiago Bernabéu nuestros socios presentes en la Grada FANS RMCF, como era su deber de madridistas activos, leales, comprometidos y alegres, en el que presumían sería el último partido de Ancelotti al frente del equipo del Real Madrid. ¡Grande Carlo! Siempre tendrás nuestro cariño.

 

 

 

 

 

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