Quiénes somos

Somos la demostración patente de una mentira (más) de la prensa deportiva. Somos más de tres centenares de socios del Real Madrid C. F., junto con casi dos mil madridistas que no tienen opción de serlo, que han demostrado que su compromiso con el destino de nuestro Club no es menor que el del más dedicado de los socios.

Somos, pues, de todas partes del mundo, porque hace muchas décadas que la grandeza de nuestro club, en un tiempo el equipo de la ciudad de Madrid, desbordó los límites siempre estrechos de un territorio para convertirse en un bien universal.

Somos madridistas que conectamos con la tradición de un Madrid que en el campo de juego, en la sociedad y en las instituciones nunca aceptó la derrota. Del Madrid heroico campeón de España que tras la guerra civil se encontró sin campo, sin plantilla, sin directivos, sin socios y con un rival patrocinado por el ejército vencedor de la contienda, y supo no rendirse y dibujar en el horizonte gris su propia Primavera, y buscarla y encontrarla y, tras 21 años sin ganar un campeonato de Liga, convertirse en el mejor equipo del Mundo. El Madrid de Bernabéu, de las Cinco Copas de Europa, origen de una grandeza imposible ya para ningún club del mundo, que con la admiración universal fue también objeto del odio, patrimonio de los más grandes.

Conectamos plenamente con el Madrid que, arteramente apartado de la conquista de la sexta Copa de Europa, dedicó su boletín de socios, con su histórica portada “La verdad sólo tiene una cara, la mentira tiene dos”, a denunciar con nombres y apellidos dos arbitrajes parciales, demostrando que el Madrid no se somete a las maniobras del poder y se defiende en el campo y fuera de él. Esos son nuestros valores: A triunfar en buena lid, defendiendo tu color.

Somos injuriados, despreciados, ultrajados y apestados. Esos a los que una prensa deportiva corrompida hasta los tuétanos ha intentado aislar con un cordón sanitario para tratar de impedir que se supiera que somos muchos madridistas, la mayoría, los que coincidimos en la necesidad de sacar a nuestro club de la irrelevancia institucional y de la subordinación mediática, lo que ellos denominan “valores”, e identificamos ese propósito en la propuesta global de un entrenador elegido certeramente por el actual presidente.

No somos una candidatura electoral, ni un grupo de oposición. Somos madridistas a los que periodistas emocionalmente vinculados al Atleti, el Barcelona, el Athletic, el Sporting, el Osasuna -clásicos focos del antimadrismo desde la década de los veinte hasta nuestros días-, disfrazados de madridistas preocupados no por la pérdida de la hegemonía sino de la de la simpatía, sucesivamente nos han tildado de abducidos, de yihaidistas, de terroristas informáticos, de quinceañeros nazis, de ultras, de descerebrados, coincidiendo con esta etapa en la que, para su preocupación, al Madrid le han vuelto a salir los dientes.

Pues bien, aquí estamos. En primer lugar, somos socios y abonados. Nuestra sola existencia desmonta la última mentira articulada, a través de una verdad a medias, para justificar la completa derrota sufrida en las redes sociales por los disfrazados de madridistas: “el madridismo no es Twitter, los que votan son los socios y abonados”. Desde luego es así: el madridismo no es Twitter. Pero Twitter,  como reflejo parcial de la sociedad, es un reflejo parcial del madridismo. Más exacto y preciso, más valioso, cuanto las noticias y opiniones que circulan por la red más están respaldadas por una identidad públicamente reconocible. Nuestra intervención en las redes sociales no aprovecha el nick como un antifaz para ocultar la autoría de actos viles, que han desacreditado la red. Un seudónimo ampara el libre ejercicio de la crítica, jamás la amenaza o la difamación. Nosotros no nos escondemos, porque no tenemos nada que ocultar. 

La expresión en nuestras cuentas oficiales (@primavera_rm y @PB_socios) y en esta página web está respaldada por la responsabilidad personal asumida por nuestros directivos, de los que a continuación podrás leer los nombres y apellidos y número de socio del Real Madrid.

Estamos en las redes sociales, y en el Estadio. Entre nuestros asociados, más de trescientos son socios, abonados y euroabonados, y más de una decena socios representantes. Y votamos. Con otros socios como tú, que ahora nos lees, esperamos llegar a ser cientos más comprometidos en la defensa de la Independencia del Real Madrid y en la proclamación del Orgullo de ser parte del Real Madrid.

Estaremos aquí y estaremos junto a ti en el Estadio Santiago Bernabéu. Con nuestros nombres, apellidos, profesión u oficio conocido. Con nuestro número de socio del Real Madrid: Filólogos, arquitectos, economistas, ingenieros, abogados, sociólogos, policías, enfermeros, pilotos, bomberos, médicos, tripulantes de vuelo, estudiantes universitarios, profesionales de oficio, periodistas, padres de familia, abuelos y abuelas, nietos y nietas…

Somos madridistas que nada tienen que aprender en formación, recursos mentales y responsabilidad social de muchos elementos de la prensa deportiva cuya capacidad de razonamiento, expresión y diálogo avergüenza cada día al oyente de radios y al espectador de televisiones, y sin embargo, por una pura razón de posición en los medios de comunicación de masas, consiguen condicionar la opinión de muchos millones de madridistas.

La JUNTA DIRECTIVA fue elegida por la Asamblea General Extraordinaria de Socios celebrada el 14 de junio de 2014. Sus miembros están inscritos en el Registro de Asociaciones.

Uno de sus miembros dimitió el 21 de diciembre de 2014, por lo que en la actualidad está formada por los siguientes socios de número de PRIMAVERA BLANCA:

Aquí estamos, pues, unidos por un sentimiento común, el orgullo de pertenecer al Real Madrid, y por un propósito único: Que el Club de nuestra vida no vuelva a ser un coto de mangantes. Y la primera condición para conseguirlo es evitar que los periodistas deportivos condicionen la actuación de nuestro Club, su independencia. El Club y los periodistas deben estar cada uno en su papel y en su terreno. Y si originariamente deseábamos que fuera con José Mourinho dirigiendo nuestro equipo, también desde el principio proclamamos que defenderíamos el lugar y el papel de cualquier entrenador en el futuro. Porque si con José Mourinho el madridismo tradicional despertó, el propósito de todos nosotros fue que continuara alerta cuando él no estuviera.

Estaremos siempre comprometidos con la acción. No nos quedaremos nunca en la mera expresión de opiniones. Actuaremos para mejorar el futuro del Real Madrid. Comprometidos en la defensa de todo aquello que vaya en la línea de incrementar su grandeza. Hemos declarado la guerra a un sistema de competición y de información corrompido y no vamos a parar hasta ganarla. El Madrid no pacta con la derrota.

¡Hala Madrid! Y nada más.

ESTATUTOS DE PRIMAVERA BLANCA.